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jueves, 26 de junio de 2014

Irak, Un país que se desmiembra en un conflicto sectario y preocupa a sus vecinos


El conflicto en Irak estalló luego que el grupo jihadista Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS) tomara la segunda ciudad iraquí más importante del país, Mosul. De ahí en más el avance de los insurgentes sunitas ha dejado en evidencia el débil manejo del gobierno y ejército iraquí para frenar al grupo que tiene como objetivo llegar a la capital, Bagdad.
El ISIS se está aprovechando de dos factores: el creciente descontento creciente entre la minoría sunnita iraquí con el gobierno del primer ministro shiíta Nouri al-Maliki, acusado de discriminación; y la cada vez mayor dimensión sectaria de la guerra civil en Siria, donde rebeldes sunnitas pelean para desterrar a un régimen dominado por chiítas. La falta de autoridad estatal en ambos países hacen que los combatientes de ISIS crucen la frontera sirio-iraquí con facilidad. Y además, en el lado iraquí, los rebeldes cuentan con el apoyo de las exfuerzas de seguridad del derrocado Sadam Husein.
El gobierno de Irak parece haber perdido el control de sus fronteras occidentales después de que los militantes sunitas capturaran puestos de cruce con Siria y Jordania.
Las autoridades dicen que los rebeldes se hicieron con el poder de dos pasos fronterizos cruciales el domingo, después de haberse apoderado el sábado de Qaim, una localidad de la provincia que hace frontera con Siria. Además, el aeropuerto de la ciudad norteña de Tal Afar, de gran importancia estratégica, también ha caído en manos rebeldes este último fin de semana.

Mapa

El avance del Ejército Islámico de Irak y el Levante (ISIS, por sus siglas en inglés) representa una amenaza no solo para Irak sino para toda la región.
Es una preocupación que han manifestado observadores y líderes políticos, incluido el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry. En este sentido, los países vecinos de Irak son los más vulnerables frente a la ofensiva de la milicia yihadista, que ante la poca resistencia que ha enfrentado a su paso, han ido tomando ciudades y pueblos en Irak.
Muchos activaron sus defensas luego de que se produjeran varias incursiones fuera de Irak durante el fin de semana. Para el chino Gao Zugui, miembro del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, dos caminos condujeron a la actual crisis.
Primero, tras los últimos logros bélicos en Siria las fuerzas del presidente Bashar al-Assad se han envalentonado. Lo que era un choque entre el régimen y una moderada oposición se ha convertido en una confrontación tripartita entre el gobierno, la oposición y los comandos insurgentes como ISIS.
Y a medida que el gobierno sirio se fortalece, cada vez le quita más espacio y aire a ISIS, lo que ha obligado a este grupo a trasladarse hacia el norte de Irak.
El segundo camino que condujo a esta crisis fue que el primer ministro Nuri al Maliki -de origen chiíta- condenó al ostracismo a los sunitas iraquíes, lo que agravó el conflicto histórico entre ellos. Esto preparó el terreno para las actividades y objetivos de ISIS.
El Estado Islámico de Irak y Siria nació del Estado Islámico en Irak (ISIS), rama iraquí de Al Qaeda, y de la fusión con el grupo jihadista sirio Frente al Nusra. Este grupo es descrito como una de las organizaciones islámicas más radicales de Medio Oriente y tiene como objetivo erigir un Estado confesional sunita en una región situada entre Siria e Irak.
Según la agencia DPA, ISIS se ha hecho con un botín de equipamiento militar pesado y cerca de 500.000 millones de dinares iraquíes (318 millones euros/430 millones de dólares), lo que lo convierte en el grupo terrorista mejor financiado de la región por delante de Al Qaeda.
Los expertos estiman que ISIS cuenta con unos 10.000 hombres en Irak. La propia organización sin embargo habla de entre 20.000 y 30.000 combatientes.
Manifestación en apoyo a ISIS
El ISIS ya controla grandes porciones del norte y el este de Siria, incluyendo buena parte de las provincias de Raqqa y Deir ez-Zor. Inspirados por sus victorias en Irak, los combatientes del ISIS tomaron la semana pasada el control de una serie de pueblos estratégicamente importantes a todo lo largo del lado sirio de la frontera. Utilizaron armamento y equipamiento que le quitaron al ejército iraquí.
El avance de ISIS, al parecer, ha generado alama en el gobierno sirio, que supuestamente se había abstenido de atacar al grupo yihadista debido al daño que ha causado a las fuerzas rebeldes moderadas. La semana pasada, la fuerza aérea siria atacó por primera vez bastiones del ISIS.
La principal alianza opositora siria, la Coalición Nacional, dijo que por años estuvo advirtiendo sobre la amenaza que representa el ISIS y que los grupos rebeldes prooccidentales e islamistas debieron haber recibido la ayuda militar que necesitaban para contrarrestarlo.
Éstos lanzaron en enero una ofensiva destinada a expulsar a ISIS de Siria, desencadenando así unos enfrentamientos que dejaron miles de muertos.
Captura de un vídeo de reclutamiento del ISIS. REUTERS.
Se sabe que ISIS lo forman individuos que lograron combinar tres conceptos la religión, la política y los conocimientos militares para crear una potente fuerza que barrió a soldados iraquíes, muchos de ellos decidieron huir, y ejecutaron a aquellos lo suficientemente estúpidos para quedarse atrás.
Estos métodos, junto con la aplicación de la Sharia, la ley islámica, que incluye actos extraños como cortar la electricidad para evitar que la gente vea la televisión, le ha dado al grupo una reputación temible.
Otro factor a tener en cuenta en el rápido avance de las tropas yihadistas lo podemos encontrar en la corrupción y el sectarismo. Dos problemas extendidos en las fuerzas de seguridad iraquíes, con poco sentido del profesionalismo o de lealtad al gobierno de Bagdad. Los soldados sunitas suelen trabajar en zonas sunitas como Mosul o Anbar, donde muchos de ellos se desmoralizan al tener que combatir contra su propia secta musulmana. Las fuerzas policiales están conformadas por las poblaciones locales así que son particularmente vulnerables a las presiones de intimidación. Hubo un caso en que las milicias islámicas decapitaron a un oficial y luego difundieron el video del ataque.
Por último nos encontramos en Irak a los kurdos. Los combatientes kurdos, con su enclave autónomo en el norte del país, muestran signos de tomar un papel cada vez más importante en la pelea contra el ISIS. Su rol es un potencial punto de fricción porque tanto los sunitas como los shiítas son recelosos frente a los reclamos territoriales kurdos.
También es de destacar en el conflicto que vive Irak, la posición de Arabia Saudita, una de las fuentes de financiación de los yihadistas del ISI.
El primer ministro de Irak, Nuri Maliki, acusó la semana pasada a Arabia Saudita, la principal nación sunita en el Golfo Pérsico, de promover "crímenes que puede calificar como genocidio", al proveer ayuda financiera y apoyo moral al ISIS. El gobierno saudita rechazó lo que dijo era una "falsedad maliciosa". Y recalcó el hecho de que desea ver la destrucción del ISIS y culpó a las autoridades iraquíes de la grave división del país.
El ejecutivo saudí respondió a las acusaciones de Irak diciendo, "Los últimos acontecimientos no hubieran sucedido sin las políticas sectarias y excluyentes que se han practicado en Irak en los últimos años por el gobierno, de mayoría chiita, de Maliki".
Pese a tal aseveración, existe la creencia extendida de que el ISIS recibe dinero de individuos ricos de Arabia Saudita. También se cree que cientos de sauditas combatieron en Irak y en Siria durante la década pasada.
El ISIS no es una corporación y no tiene accionistas, pero el éxito militar y la brutalidad del grupo yihadista surgido a través de Irak ha sido registrado con un nivel de precisión a menudo reservado, exclusivamente, para los balances de una empresa.
Desde 2012, el Estado Islámico de Irak y Siria (Isis) ha publicado informes anuales, exponiendo en detalle numérico y geográfico sus operaciones, el número de atentados, asesinatos, puestos de control, misiones suicidas, ciudades tomadas e, incluso, los "apóstatas" convertidos a su causa. Sólo en 2013, el informe del grupo se atribuyó casi 10.000 operaciones en Irak: 1.000 asesinatos, 4.000 artefactos explosivos improvisados sembrados y cientos de presos radicales liberados. En el mismo año, asegura, cientos de "apóstatas" se habían convertido, según comentan Roula Khalaf y Sam Jones en un artículo para la revista Financial Times.
Llamado al-Naba ("las Noticias"), los informes correspondientes a 2012 y 2013 (un año en el que 8.000 civiles murieron en Irak) han sido analizados por el Instituto para el Estudio de la Guerra de EE.UU., que corrobora la mayor parte de la información que contienen. El objetivo del Isis parece ser demostrar su registro a posibles donantes, continúa diciendo el artículo del FT.
Militantes de ISIS contra fuerzas iraquíes
Miembros del ejército iraquí presos tras enfrentamiento con militantes del ISIS.
Poco se sabe sobre Abu Bakr al Baghdadi, el líder del grupo extremista Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), que tomó el martes el control de Mosul, la segunda ciudad iraquí y avanza rápidamente hacia la capital, Bagdad. Baghdadi protagoniza la portada de la revista Time que le califica como "el hombre más peligroso del mundo". Para Le Monde, "es el nuevo Bin Lade".
Para diversos analistas las imágenes de los soldados estadounidenses derribando una estatua del tirano Sadam Husein en el corazón de Bagdad, como las actuales con los yihadistas del Estado Islámico en Irak y el Levante (ISIS, por sus siglas en inglés) en primera plana, tienen su origen en la misma mentira: las armas de destrucción masiva con las que supuestamente el régimen iraquí amenazaba al mundo.
Los efectos de la invasión también quedaron reflejados en la aniquilación de las instituciones iraquíes. "Cuando los estadounidenses llegaron en 2003, destruyeron el Estado iraquí, su ejército, su administración, su policía y todo lo que permite a un país mantenerse en pie", escribió el periodista Dexter Filkins en The New Yorker. "Lo que construimos se está derrumbando. Esa es la verdadera herencia de la guerra estadounidense en Irak", añadió.
Asimismo, la analista política Nazanín Armanian señala otra consecuencia de la invasión y, a la postre, caldo de cultivo para la situación actual: la instalación de un Gobierno sectario religioso. "El Ejecutivo que salió tras la caída de Sadam rompió la larga tradición laica del país. Luego Maliki se ha encargado de excluir a los kurdos y a los suníes y de perseguir a cualquier voz crítica", resume la también experta en Oriente Próximo.
Los hechos recientes renuevan la posibilidad, muy discutida durante la guerra hace diez años, de que Irak sea dividido en tres regiones o incluso naciones: la sección chiíta (con Bagdad, gran parte del sur y este fronterizo con Irán), un área sunita comprendida por el oeste iraquí y partes del norte; y una zona kurda, también en el norte, incluyendo las ciudad de Irbil y Kirkuk.
Los países vecinos observan, con detalle, todos los acontecimientos y muestran su preocupación por un conflicto que puede desestabilizar toda la región. Un califato islamista, como pretende crear el ISIS, podría representar un permanente peligro para todos los vecinos.
Esa organización ya controla grandes porciones del norte y el este de Siria, incluyendo buena parte de las provincias de Raqqa y Deir ez-Zor. Inspirados por sus victorias en Irak, los combatientes del ISIS tomaron la semana pasada el control de una serie de pueblos estratégicamente importantes a todo lo largo del lado sirio de la frontera.
A lo largo de su frontera con Irak, Jordania ha reforzado sus defensas con tanques y lanzacohetes luego de que los militantes sunitas se apoderon de parte del territorio en el oeste de la provincia de Anbar y tomaran el control de la parte iraquí del único paso terrestre hacia Jordania, en Traybil.
El jeque Raad al-Suleiman, una importante figura de la ciudad de Ramadi, le dijo a la BBC que la población sunita protagonizó una extensa rebelión en Anbar.
La pérdida de Traybil no es vista como una amenaza inmediata a la seguridad de Jordania. Sin embargo, fuentes del ejército le dijeron el domingo a la agencia de noticias Reuters que unidades del ejército habían sido puestas en estado de alerta.
Algunos analistas creen que Jordania podría ser el próximo objetivo del ISIS. No obstante, recalcan que el gobierno jordano es más estable que el iraquí y que sus ideólogos yihadistas denunciaron la brutalida del ISIS.
Irán, de mayoría chíita, ya ha ofrecido su ayuda al gobierno de Irak, sabiendo que un dominio sunita en Irak sería un permanente peligro potencial para el país, al mismo tiempo que Teherán perdería su importante influencia en el país vecino.

Desfile de combatientes del Ejército de Al-Mahdi del clérigo chií y líder de facto de la Ciudad Sadr en Bagdad, Muqtada al-Sadr.
Desfile de combatientes del Ejército de Al-Mahdi del clérigo chií y líder de facto de la Ciudad Sadr en Bagdad, Muqtada al-Sadr. REUTERS.

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