Translate

sábado, 18 de enero de 2014

Estados Unidos, La ejecución de Dennis McGuire desata la polémica por su larga agonía

El ejecutado fue acusado de violar a una mujer embarazada y matarla
Dennis McGuire, ejecutado el pasado jueves en Ohio.
La última ejecución de un condenado a muerte en los Estados Unidos ha generado una gran polémica, más allá de la propia pena de muerte, en el país dado que el ejecutado sufrió, una larga agonía, antes de que los médicos dictaminasen su muerte.
El estadounidense Dennis McGuire, condenado a muerte en el estado de Ohio en 1994 por violar y degollar a una mujer embarazada, una joven de 22 años, en 1989 ha acabado con polémica por la agonía causada al condenado. La ejecución se produjo mediante un nuevo tipo de inyección letal, una combinación de dos fármacos, que no se había usado anteriormente.
Al igual que la mayoría de los 32 estados que aplican la pena capital en Estados Unidos, en Ohio se han agotado las inyecciones letales con pentobarbital, de modo que desde septiembre, cuando se utilizó la última, las autoridades han tenido que experimentar con nuevas mezclas para aplicar la condena.
Así, a McGuire, de 53 años, ejecutado durante la mañana del pasado jueves en el Centro Correccional de Ohio del Sur, en Lucasville, se le aplicó una fórmula compuesta por los siguientes medicamentos: midazolam, un sedante, e hidromorfona, un analgésico utilizado en este caso para detener la respiración. Este tipo de combinación nunca había sido utilizado con anterioridad.
Esta mezcla se utilizaba hasta ahora como apoyo a la inyección letal convencional en algunos estados.
Los abogados de McGuire trataron de impedir la ejecución hasta el último momento, alegando que la muerte de su cliente sería anticonstitucional porque iría acompañada de dolor, extremo que rechazó el gobierno estatal.
Según los abogados, esta inyección provocaría complicaciones respiratorias a McGuire, quien sufría apnea del sueño, antes de morir y, aún consciente, notaría cómo se ahogaba.
No obstante, un juez federal determinó el pasado lunes que su argumentación no estaba probada y también el gobernador de Ohio, John Kasich, rechazó la petición de clemencia.
Durante años, en Estados Unidos se utilizó una combinación estándar de tres medicamentos para la inyección letal: un anestésico o barbitúrico (habitualmente pentotal sódico o pentorbital en su defecto), un agente paralizante (bromuro de pancuronio) y otro para parar el corazón (cloruro de potasio).
Pero en los últimos años se ha complicado el acceso a los ingredientes clave de la inyección, los barbitúricos.
En 2011, la empresa que proporcionaba el pentotal sódico, que entonces era utilizado por todos los estados donde la pena capital era legal, la estadounidense Hospira Inc., dejó de fabricar este fármaco.
Las cárceles miraron entonces a Europa como alternativa para conseguir barbitúricos, pero las farmacéuticas europeas, principalmente el laboratorio danés Lundbeck LLC, que fabrica el pentobarbital, se negaron pronto a venderlo para los fines requeridos, ya que la Unión Europea se opone a la pena de muerte.
Por este motivo, en las tres ejecuciones que se han llevado a cabo en lo que va de año en Estados Unidos se han utilizado diferentes mezclas de fármacos en las inyecciones letales.
En el caso de Ohio, agotadas las existencias de las antiguas inyecciones letales, este estado, que tiene 139 personas en el corredor de la muerte, modificó su normativa sobre ejecuciones para permitir el uso de midazolam y hidromorfona.
Según el periódico local "Columbus Dispatch", uno de cuyos periodistas presenció la ejecución, pasaron 24 minutos desde que se le administró la inyección hasta que fue declarado fallecido.
Unos cuatro minutos después de recibir la inyección letal, McGuire empezó a jadear, luchando por respirar, y a emitir sonidos de asfixia, mientras apretaba su puño izquierdo, durante al menos 10 minutos, tras los cuales cesaron sus movimientos, pero siguió vivo unos minutos más, hasta que finalmente se declaró su muerte, explicó el 'Columbus Dispatch'.
Los hijos y la esposa del ejecutado vieron todo el proceso desde una sala adjunta, en el Centro Correccional de Ohio del Sur en Lucasville, acompañados por la hermana de la víctima de McGuire.
Los abogados de McGuire habían argumentado en un recurso de último minuto rechazado el lunes por un tribunal federal que la combinación no había sido utilizada nunca y le pondría en un riesgo sustancial de padecer un tremendo dolor y una terrible incapacidad de respirar antes de perder la conciencia durante la ejecución.
Temores que, finalmente, se confirmaron. Los letrados calificaron la ejecución como "un experimento fallido y atroz" del gobierno de Ohio.
El juez de distrito Gregory Frost dijo que McGuire no había conseguido demostrar un riesgo sustancial de grave dolor, aunque también reconoció que eso no significaba que el tribunal estuviera convencido de que la ejecución sería indolora o no tendría complicaciones.
Respecto a la controversia que ha suscitado esta ejecución, la familia de la joven asesinada por McGuire defendió en un comunicado que el preso ha recibido un trato "mucho más humano que el que él le dio a ella".
Dennis McGuire es el tercer hombre ejecutado este año en Estados Unidos, país que quitó la vida por mandato legal a 39 seres humanos durante 2013.

Click to enlarge image p18ef6kaf7g3ajltk884ncvga4.jpg

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Puedes dejar aquí tus opiniones e impresiones sobre una entrada concreta, sobre algún tema sobre el que te gustaría ver una nueva entrada o sobre cualquier tema del blog en general.