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viernes, 22 de febrero de 2013

Italia, Beppe Grillo, un humorista encabeza un panorama incierto

A 24 horas de que se inicien las elecciones en Italia, nada permite especular con los resultados de estas legislativas marcadas por el alto volumen de indecisos y faltando sólo pocos minutos para entrar en el denominado "período de reflexión" durante el cual no puede difundirse propaganda electoral ni realizarse ningún acto de campaña electoral, el panorama es el siguiente:
Por un lado tenemos la posibilidad de una, nada deseada, vuelta al poder de Silvio Berlusconi. Las declaraciones publicadas ayer jueves al periódico alemán Bild en ese sentido, del presidente del Parlamento Europeo, el socialdemócrata alemán Martin Shulz, no dejan lugar a dudas. "Silvio Berlusconi ya ha hecho tambalearse a Italia con su irresponsable actuación de gobierno y sus escapadas personales", con esas palabras tan diáfanas y contundentes Shulz pedía a los italianosque no votaran a Berlusconi. El mismo continúa diciendo: "hay mucho en juego y concretamente que no se arriesgue la confianza en el país que se ha ganado con Mario Monti". Por su parte, el economista jefe del banco alemán Commerzbank, Jörg Krämer, declaraba que la reelección de Berlusconi “puede ser un guión de terror y la crisis nacional puede resurgir nuevamente”.
Con estas declaraciones, y otras en la misma línea, y de una manera creo contundente, se está transmitiendo a los votantes que el voto por el candidato del partido Pueblo de la Libertad podría significar un alto riesgo para la estabilidad en los mercados de Italia y en consecuencia para la zona euro y su futuro.
En su línea habitual, ausente del acto de clausura de la campaña por una conjuntivitis, Berlusconi ha enviado un vídeo pidiendo el voto para su candidatura y en el que se despide con la frase "mando un abrazo para los hombres y dos para las mujeres".
Aunque los analistas políticos se están preparando para un posible empate entre la alianza de centro izquierda encabezada por Pier Luigi Bersani, del Partido Democrático, y la alianza conservadora de Berlusconi, Pueblo de la Libertad, ha emergido en el panorama italiano, estos últimos días, la posibilidad de la sorpresa a través del líder del Movimiento 5 Estrellas, el comediante Beppe Grillo, al que el periódico italiano Corriere della Sera sitúa en su edición de hoy, a falta de sondeos -que ya están prohibidos-, como segunda fuerza política del país con estas palabras "Il Movimento 5 Stelle si è piazzato al secondo posto, giusto dietro il Partito democratico".
En estos momentos, en la clausura de lo que ya se denomina en Italia "Tsunami Tour" de Beppe Grillo, la plaza de San Giovanni (Roma) -como ya sucedió anteriormente en otras grandes ciudades de Italia-, donde el candidato del Movimiento 5 Estrellas cerrará su campaña, está tomada por una multitud que ocupa todos los rincones de la misma y que aguarda impaciente el discurso final del que algunos medios llaman el "político antisistema". La cadena de televisión Repubblica, que está retrasmitiendo en directo el evento, calcula en más de 200.000 los romanos que ocupan una plaza que tiene una capacidad para unas 80.000 personas.
Con el transcurso de la campaña electoral, como publica hoy el diario español El País, "Grillo se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los partidos tradicionales, que no han dudado en arremeter contra él y sus propuestas advirtiendo que es un peligro para la democracia". 
Para el NYT, en un extenso artículo que publicó días atrás "el crecimiento del movimiento de protesta que se observa detrás del Movimiento 5 Estrellas muestra la profundidad del desencanto en Italia y hace crecer el mensaje anti sistema que resuena en todo el país". 
El anterior primer ministro Mario Monti, que parece haber entrado en un tobogán descendiente en las intenciones de voto, busca su lugar en el parlamento y el senado italianos, con una supuesta "bendición" desde el gobierno alemán, con este tipo de declaraciones: "Merkel teme la consolidación de partidos de la izquierda, especialmente en un año electoral para ella; no creo que tenga algún deseo de ver al PD llegar al Gobierno" repetidas a lo largo de su campaña.
Así mismo está llamando a los votantes a no dejarse llevar ni por falsas promesas "Los ciudadanos pueden votar engañados por promesas falsas, pero después ¿adónde van?", refiriéndose al compromiso de Berlusconi de suprimir el impuesto sobre bienes inmuebles (IMU) a la primera vivienda y devolver lo pagado en 2012, ni por la rabia a la hora de emitir su voto "Los ciudadanos pueden votar también por la rabia, llenando las calles, pero si la rabia no se transforma en cambio del país, sino en un referéndum sobre la salida del euro, ¿adónde van?", comentó. 
Aunque actualmente ocupa la cuarta posición en las intenciones de voto, puede jugar un papel clave en el control del Senado y en la formación del Gobierno. Pero de hacerse efectiva su caída puede imposibilitar un posible acuerdo con Bersani para garantizar su estabilidad en la Cámara Alta.
El líder del progresista Partido Demócrata (PD), Pier Luigi Bersani, favorito en los sondeos, es un veterano político formado en las antiguas filas del Partido Comunista Italiano (PCI), que está basando su campaña en la defensa de sus ideas liberales, y aunque afirma que mantendrá el rigor en materia presupuestaria que defiende Monti, no será a costa de sus prioridades: generar empleo y disminuir la brecha de la desigualdad.
Con experiencia de gobierno, al ser ministro de varios gobierno de Romano Prodi, pero sin carisma público, está siendo visto por numerosos analistas como la alternativa más responsable, o realista, para la actual Italia.
The Economist se preguntaba el pasado 14 de febrero, "Who can save Italy?", -¿Quién puede salvar Italia?- bajo una imagen de la Torre de Pisa, recordando el cuadro económico del país que mantiene 14 años de crecimiento cercano al 0 y una recesión profunda desde 2007, provocada por diversos motivos, y diferente de la de España o Grecia dada la existencia de un déficit público más controlado y la inexistencia de burbuja inmobiliaria.
En este contexto, una gran inquietud se respira en medios políticos: ¿cúal será el nivel de absentismo?
Una cuestión parece evidente: la estabilidad en la política italiana parece lejos de haber llegado y es posible que las conversaciones para formar un gobierno que la consiga sean largas y complicadas.
Los votos del pueblo italiano definirán las incógnitas a ser resueltas, mientras una gran parte del mismo, y también desde afuera, espera que Berlusconi no se instale nuevamente en el poder. 
Con el cierre de los colegios electorales el próximo el lunes, alrededor de las 15 hrs. (hora local), se iniciará el recuento de los votos. Así, los primeros resultados se darán a conocer en el transcurso de la noche.

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